Las varillas para soldar, por ejemplo, están hechas de un metal fino que puede calentarse a alta temperatura y luego enfriarse de nuevo. El metal se calienta a unos 1.000 grados Celsius, lo suficientemente caliente como para fundir el acero. A continuación, el metal se enfría a unos 200 grados centígrados bajo cero. A continuación, se introduce el metal en una cámara de vacío y se calienta de nuevo a unos 1.000 grados Celsius. Esta vez, el metal se enfría a menos 200 grados centígrados.
Electrodos de soldadura
Varillas de soldadura de acero inoxidable 304/308 para soldador de arco MIG de argón 1KG
Varillas soldadura